Los negociadores del MERCOSUR y la Unión Europea se reunieron para dialogar sobre las ofertas de liberalización comercial que deberían intercambiar antes de fin de año.

Durante la última semana de septiembre se reunieron en Asunción, Paraguay, los negociadores del MERCOSUR y la Unión Europea (UE) con el objetivo de dialogar acerca de las ofertas de apertura comercial que deberían intercambiar a fin de año, según lo acordado en junio pasado.

Los países del MERCOSUR consensuaron una oferta común en julio de 2014. Si bien los detalles no se conocen, esta propuesta contemplaría la desgravación de 87,5% del comercio, levemente por debajo del 90% solicitado por la UE. Debe mencionarse que Bruselas podría alcanzar ese nivel de cobertura sin incluir a los productos de mayor interés para el MERCOSUR. En efecto, muchos de los agroalimentos donde el bloque sudamericano es muy competitivo no serían desgravados sino que ingresarían al mercado europeo mediante contingentes arancelarios.

La UE, por su parte, espera que el MERCOSUR mejore la oferta previa en otros temas como servicios y compras gubernamentales. En contraste con el comercio de mercancías, en el caso de los servicios no habría una oferta única por parte del MERCOSUR sino que cada país haría su propia lista de compromisos. Asimismo, la UE requiere que el bloque sudamericano brinde trato nacional en materia de contratación pública a potenciales proveedores europeos. Hasta el momento, los países del MERCOSUR no otorgan ese trato a los oferentes de los miembros restantes.

 

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