Por: Romina Gayá (Consultora del INTAL)

El cambio tecnológico a nivel mundial está modificando los mercados laborales en todo el mundo. América Latina y el Caribe (ALC) no es la excepción y el tema fue eje de debate en INTAL50.

Con la automatización de tareas, algunas ocupaciones desaparecerán progresivamente debido a la automatización, en tanto que surgirán más oportunidades para algunas actividades existentes y se crearán otras nuevas. El futuro del empleo fue uno de los temas centrales en INTAL 50, el evento central de celebración del 50° aniversario del INTAL.

El panel sobre el trabajo en el siglo XXI estuvo compuesto por Carl Benedikt Frey (Programa Oxford Martin sobre Tecnología y Empleo) y Sergei Soares (IPEA).

De hecho, el impacto de estos cambios excede el mercado laboral y podría modificar el modo en el que distintos países se insertan internacionalmente.[1]

El desarrollo tecnológico está haciendo posible que las computadoras no solamente realicen tareas rutinarias y cálculos complejos, sino también actividades no repetitivas a partir del análisis de big data. Algunos ejemplos de ello son Watson -la computadora diseñada por IBM que examina información de pacientes oncológicos y sugiere el tratamiento más adecuado según datos empíricos almacenados-, el Traductor de Google –el cual traduce automáticamente documentos- o el automóvil sin conductor de la misma empresa.

Históricamente, el cambio tecnológico ha sustituido empleos, pero ha creado más puestos de trabajo de los que ha reemplazado. Las innovaciones más recientes están generando una polarización, en la cual pierde importancia la demanda de ocupaciones rutinarias con salarios relativamente bajos y aumenta la de trabajadores calificados, cuyas remuneraciones son mayores. Este fenómeno es generalizado a nivel mundial, con excepción de China donde continúa creciendo la demanda de trabajo no calificado.

A pesar de la creciente automatización, la creatividad, la inteligencia social, la percepción y la manipulación son ámbitos en los cuales las capacidades humanas superan a las de las computadoras.

Frey y Osbourne (2013) estimaron las probabilidades de automatización de más de 700 ocupaciones a partir de datos de Estados Unidos. Sus cálculos indican que la susceptibilidad de ser reemplazada por computadoras varía mucho entre distintas actividades, pero son más vulnerables los puestos de trabajo de baja calificación en la industria manufacturera, la minería y ciertos servicios como los de back office, logística, comercio, transporte, almacenamiento, construcción, entre otros. En el otro extremo, la probabilidad de ser reemplazado por una computadora es menor en las actividades que requieren estudios superiores en ámbitos como ingeniería informática, servicios financieros, etc. El surgimiento de nuevas tareas implicará mayores oportunidades para ingenieros en informática, administradores de redes, expertos en logística, etc. Asimismo, se prevé el desarrollo de “ciudades calificadas” con externalidades positivas derivadas de la aglomeración geográfica de los sectores más dinámicos.

¿Robotizados?

Fuente: INTAL Interactivo

Este contexto plantea retos importantes para América Latina y el Caribe, pues una parte importante de sus exportaciones se concentra en actividades de baja calificación susceptibles de ser automatizadas, como las manufacturas intensivas en trabajo, la explotación de algunos recursos naturales y servicios como call centers, servicios contables, legales o de administración, entre otros. Es por ello que la región debe promover la educación de calidad haciendo hincapié en las competencias que se necesitarán en el futuro y estimular la investigación y desarrollo para incrementar la productividad.

Esto es crucial no solamente para adecuarse a los cambios que tienen lugar en el mercado laboral, sino también para reducir los elevados niveles de desigualdad de la región.

 

Bibliografía

Frey, C. y Osbourne, M. 2013. “The future of employment: how susceptible are jobs to computerisation?”. Oxford: Universidad de Oxford.

 

 

[1] Esta nota está basada en las ponencias de Carl Benedikt Frey (Programa Oxford Martin sobre Tecnología y Empleo) y Sergei Soares (IPEA) del evento central de celebración del 50° aniversario del INTAL.