Durante los últimos meses, el INTAL LIB ha ido transformándose para poner su acervo de conocimiento a disposición de más usuarios alrededor de la región y el mundo.

La información y el conocimiento son características dominantes en la sociedad, y cualquier actividad humana avanza con ellos. En este sentido, INTAL-LIB, ex Centro de Documentación del INTAL, se ocupa de identificar, recopilar, organizar y diseminar información sobre temas pertinentes a la integración y el comercio de América Latina y el Caribe.

Siendo en sus orígenes, fundacional al INTAL (1965), con su creación de la mano de Felipe Herrera -por entonces Director del Banco Interamericano de Desarrollo-, INTAL-LIB ha sido desde siempre un instrumento indiscutido, regido por el interés de apoyar las investigaciones y el compromiso con la integración regional desde el área del conocimiento.

A través del desarrollo de sus colecciones, el CDI se mostró como testigo de los cambios, a través del reflejo de las actividades de investigación y el flujo de literatura científica publicada.

Durante más de 50 años, su colección cubrió tanto aspectos de actualidad como históricos, puso énfasis en sus publicaciones institucionales e incorporó además documentos de otras fuentes, manteniéndose permanentemente actualizado.

En los últimos 20 años, el incremento de las fuentes de información en Internet, la facilidad para publicar, y la ausencia del ejercicio de un rol de selección y revisión de los recursos digitales, como criterio de base para el desarrollo de la Web, planteó la necesidad de desarrollar y aplicar una metodología de evaluación de la información previa a la incorporación de recursos, lo que permitió ofrecerle al usuario una información rigurosamente científica y útil.

Este nuevo reto para las unidades de Información marcó para el CDI el primer paso en el nacimiento de una biblioteca digital.

Ante este panorama los servicios y funciones sufrieron cambios de raíz que implicaron modificaciones en el modo en que la información se hace accesible al usuario. Y este es el punto en que el viaje comenzó a ser distinto:

  • Innovación en la transición de catálogos impresos a OPAC
  • Creación de un sistema propio de registro de fuentes bibliográficas
  • Constitución de colección principalmente de documentos de Acceso al texto completo. Esto se logró gracias al manejo de un servidor propio de estos documentos que brindan un resguardo permanente de publicaciones.
  • Atención a usuarios regionales e internacionales
  • Creación de productos novedosos y pertinentes para las necesidades de la comunidad de usuarios en aumento
  • Más de 10.000 suscriptos a sus novedades
  • Consolidación de un vocabulario controlado propio sobre Integración y Comercio, único en el mundo.
  • Finalmente, la reducción de su biblioteca impresa que ya se encuentra digitalizada

La mantención del acervo institucional preservado y el mejoramiento de las nuevas tecnologías derivaron en el surgimiento de un espacio innovador para la investigación de los procesos de integración regional, que abraza las últimas tendencias en el manejo y diseminación de información sumándole las tradicionales características de rigor y selección clásicas con las que siempre se presentó la unidad de información.

Con más de 32.000 documentos de acceso al texto completo dispuestos online y la conexión a más de 650 instituciones referidas a las temáticas abarcadas por el INTAL, el ahora renombrado “INTAL LIB” se constituyó a lo largo de los últimos años como un centro de referencia especializado en la búsqueda y curación de información auténtica, valiosa y accesible sobre las dinámicas que se han desarrollado a nivel regional y mundial.

 

En una época cada vez más atravesada por la tecnología en la que los tiempos se acortan, crece a la par la necesidad de información especializada gestionada con herramientas específicas a través de servicios y productos adaptados a las necesidades de usuarios mucho más demandantes y la combinación de ambos elementos puede derivar en amenaza.

Tito Livio, en Ab urbe condita, narra el temor de los habitantes de Roma al ver aparecer a Aníbal Barca y a su ejército ante sus murallas, tras la batalla de Cannas en 216 a. C:

 –Hannibal ad portas-  se convirtió en la frase que los progenitores romanos usaban para asustar a sus hijos ante un peligro grave e inminente.

Hannibal ad portas pudo haber significado para nosotros, una alarma, una preocupación. Sin embargo, se nos dio por entenderlo como un llamado a la innovación, al renacimiento, un desafío posible y esperanzador, una necesidad de mejorar.

“Una profesión o institución desaparece sólo cuando su misión se convierte en irrelevante para la sociedad o todas las actividades requeridas para su misión puede ser automatizadas”.

Este no será el caso del INTAL LIB.

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