El gigante asiático está en vías de superar a Estados Unidos este año como el mayor consumidor mundial de petróleo.

China necesita aumentar sus importaciones de crudo desde la “nueva frontera”: una región extensa que parte en el Golfo de México y que comparten Estados Unidos, Canadá y naciones latinoamericanas, a fin de satisfacer su creciente demanda.

Sinopec, el mayor comprador de crudo de China, tiene previsto recibir más cargamentos desde Brasil, Estados Unidos y Canadá, a fin de ayudar a estabilizar los suministros de petróleo en momentos en que Oriente Medio eleva su capacidad de refinación y África sufre interrupciones de producción.

Los cargamentos desde América alcanzaron un máximo histórico en marzo, lo que elevó la participación de la región en el mercado chino en 1,1 puntos porcentuales durante el primer trimestre a cerca de 14%.

Para mayor detalle sobre la dinámica del mercado de petróleo y su impacto sobre los precios América Latina, véase el artículo: ¿De qué depende la recuperación de los precios de los productos básicos?

Una visión de largo plazo de la evolución del comercio de petróleo y sus tendencias se encuentra en el capítulo 4 del Monitor de Comercio e Integración 2016.