En las manos de los creativos, diseñadores, artistas y emprendedores podría estar parte de la respuesta a los desafíos de desarrollo de América Latina y el Caribe.

El informe Economía Naranja: Innovaciones que no sabías que eran de América Latina y el Caribe, elaborado por el sector estrategia de economías creativas, innovación y emprendimiento del BID, recopila de modo ilustrativo y claro diferentes iniciativas y proyectos que están impactando en la vida de las personas a través del manejo e impulso de la llamada “Economía creativa” desde América Latina para el mundo.

El área explorada en este reporte es la denominada Economía Naranja, es decir el conjunto de actividades que de manera encadenada permiten que las ideas se transformen en bienes y servicios, y cuyo valor puede estar basado en la propiedad intelectual, según la definición del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

La metodología empleada consistó en un mapeo enfocado en obtener información acerca de las innovaciones en las industrias creativas y culturales que impulsan nuevos modelos y formas de dar soluciones en distintos lugares de Latinoamérica y el Caribe. El énfasis del trabajo está puesto en las innovaciones tecnológicas. Los autores identificaron emprendimientos específicos en arquitectura, artesanía, diseño, medios, moda, música, servicios creativos, software y plataformas digitales.

La economía naranja es un fenómeno que despierta cada vez más interés en las agendas de desarrollo de los países de América Latina y el Caribe. La razón de ello es que un fortalecimiento de estas actividades no solo impulsa el crecimiento económico a través de la creación de valor, sino que sus iniciativas confluyen en sistemas de innovación vinculados con sectores prioritarios para la región.

Para América Latina y el Caribe, la economía naranja significó 1,9 millones de puestos de trabajo en el 2015.

 

Luzardo, A; De Jesús, D; Pérez, M. Economía Naranja: Innovaciones que no sabías que eran de América Latina y el Caribe. BID, 2017.