Ministros, académicos y representantes del sector privado compartieron experiencias y plantearon objetivos a futuro para que la infraestructura sea el puente del crecimiento económico y social.

Convocada por la Corporación Andina de Fomento (CAF), se llevó a cabo en Buenos Aires la Conferencia “Infraestructura para el Desarrollo de América Latina”. El propósito del evento estuvo centrado en reimpulsar en la agenda política de la región la relevancia de la infraestructura con proyectos que reduzcan los costos logísticos y dinamicen la complementariedad productiva entre los países.

“Debemos pasar de un ‘paradigma unidimensional’ centrado en integración física, hacia un ‘paradigma multidimensional’ de integración física y funcional” dijo Luis Carranza, presidente de CAF. “Este enfoque funcional debe englobar intervenciones sistémicas –infraestructura, servicios, gobernanza- sobre corredores logísticos que articulen diversos ámbitos de desarrollo como clústeres productivos, ejes de interconexión, pasos fronterizos, áreas metropolitanas o puertos”, explicó.

Carranza planteó interrogantes sobre diversos temas -como telecomunicaciones, transporte, cambio climático, accesos a los grandes centros urbanos, financiación privada de proyectos, economía digital y transparencia, entre otros- y expresó que la región debe darles respuestas en el marco de una “integración inteligente al mundo”.

Marcos Peña, jefe de gabinete de ministros de Argentina, agradeció a CAF el apoyo, el conocimiento y las experiencias compartidas en el tema de las Asociaciones Público-Privadas (APP) de otros países de la región para impulsar el proceso que está llevando adelante junto a su equipo: “Argentina puso en marcha el plan de infraestructura más ambicioso de su historia. El gobierno está trabajando en el desarrollo de cloacas, de agua potable y de acceso a la vivienda, y mejoras en infraestructura de educación y de salud”. También coincidió con las autoridades de CAF en que “la inversión en infraestructura impulsa el crecimiento y la productividad necesarios para aprovechar las oportunidades del futuro, por eso elegimos, como una de las prioridades del G20 2018, la infraestructura para el desarrollo”.